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Archon Delaine

Información del Códice sobre PERSONAJES «Archon Delaine».

«Te lo aseguro, Delaine es eI desgraciado más de confianza con eI que puedes trabajar. ¿Por qué? Porque siempre cumple con sus amenazas. Siempre que alguien te dice que va a cortarte los dedos índices y clavártelos en las fosas nasales con tu propio pie cercenado, sabes que es un farol. Pero si te lo dice Delaine, sabes que hará exactamente lo que te dice, al pie de la letra. Quiere que la gente le tenga miedo y eso implica cumplir sus promesas. Es algo digno de respetar».

Mantal Hoeck, comerciante de armas

Archon Delaine es el jefe de Kumo Crew, una poderosa mafia criminal. Se hace llamar «el Rey Pirata«, un título no reconocido por ningún gobierno.

La infancia de Delaine no aparece registrada en ninguna parte y varias leyendas se disputan su origen. Algunos creen que creció en una guarida de droga y narcotraficantes en uno de los mundos fronterizos, donde aprendió a pelear. Otras historias lo sitúan como portero del prostíbulo en la que nació o formándose como mecánico en un astillero orbital que albergaba peleas clandestinas después de la jornada laboral. Lo que sí es cierto es que Delaine desafió (y asesinó) al señor de los piratas reinante en Kumo Crew cuando solo tenía 15 años.

EI título de señor de los piratas solo se transfiere con la muerte del propietario, ya sea a un sucesor designado o al vencedor del desafío ceremonial. Según la tradición, el señor de los piratas debe aceptar todo desafío al liderazgo independientemente de quién lo requiere, aunque la elección de las armas recae sobre él. En el caso de Delaine, el señor de los piratas Crabbe eligió una pelea a puño descubierto, una elección muy poco habitual. Se dice que Crabbe vio a Delaine como un objetivo débil por su albinismo, no merecedor de la atención del señor de los piratas. Es posible que Crabbe solo pretendiera darle una paliza a Delaine en vez de matarlo realmente. De ser así, ese acto de piedad fue su fin.

Las imágenes de la pelea, grabadas por los espectadores, muestran a Delaine esquivando con destreza los fuertes golpes de Crabbe para que el grandullón se cansara, antes de asestar un puñetazo inesperado al ojo del señor de los piratas. Entonces, Delaine golpeó a Crabbe hasta someterlo y continuó golpeándolo hasta que quedó irreconocible.

Kumo Crew se dividió inmediatamente, por un lado estaban los que consideraban que Delaine era un líder legítimo y por otro los que se negaban a seguir a un joven sin trayectoria. Sin embargo, la disputa quedó pronto resuelta, pues Delaine demostró ser igual de capaz como líder que como luchador. Resultó evidente que Delaine no solo pretendía labrarse su propia reputación, sino también la de la organización.

Desde entonces, Delaine ha machacado todo desacuerdo con la misma brutalidad inflexible que mostró con Crabbe. Su política era de tolerancia cero frente las riñas absurdas que habían paralizado Kumo Crew en el pasado y, de esta manera, convirtió lo que era una banda anárquica de oportunistas en una tropa de asalto letalmente efectiva.

Unidos por un propósito y más organizados que nunca, Kumo Crew se convirtió rápidamente en el terror del sector Pegasi: absorbían bandas piratas menores, saqueaban estaciones civiles con impunidad y se hacían con el control de instalaciones corporativas. Durante los primeros años de liderazgo de Delaine, muchos señores piratas rivales exigieron el derecho a un combate uno contra uno, convencidos de que serían los que acabarían con él y se harían con su envidiable imperio criminal. Delaine se enfrentaba a cada uno de ellos, incluso aceptaba su elección de armas, y los despachaba rápidamente. Después de la muerte del señor de los piratas Horvath, al que Delaine estranguló con su látigo de cuchillas, no se produjo ningún desafío más.

Delaine y su Kumo Crew gobiernan mediante el miedo, pero funcionan en base a unas reglas estrictas. Si un asentamiento en territorio kumo ha pagado el tributo, todo pirata kumo lo suficientemente necio como para asaltarlo se arriesga a perder el rango, la tripulación, las posesiones, la piel y la vida, según la gravedad de la ofensa. Estas son las infames «cinco privaciones» iniciadas por Delaine como castigo estándar en todo el territorio de los Kumo.

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